Seguramente la mayoría de vosotros ya tenéis pensada la decoración para la mesa de Nochevieja.
Aunque también habrá alguno que no se haya decidido; por eso os traigo la que he puesto en mi casa, por si os inspira.
Este año me he decidido por el granate y el oro, son dos tonos que combinan muy bien y le dan un aire sofisticado a la mesa.
Para acentuar los dorados he dispuesto la cubertería, los servilleteros, los bajoplatos y el camino de mesa en ese color.
La vajilla clásica de porcelana blanca y con el filo dorado no desentona nunca, aunque sea en una decoración más desenfadada.
Por último, como centro de mesa un arbolito y cuentas de oro que cuelgan a los lados y alcanzan los candelabros de cristal.
Feliz 2016!!!